Previa New York Knicks 2016/2017: un equipo "europeo" renovado y con vistas de ir más allá
No es ningún secreto que los Knicks están inmersos en una travesía por el desierto que dura ya demasiado tiempo. Con la pasada, son ya 16 las campañas de objetivos no cumplidos. El balance es de solo cinco apariciones en Playoffs en lo que llevamos de siglo, cayendo en segunda ronda en la temporada 2012-2013 y en primera las otras cuatro ocasiones que consiguieron clasificarse para disputar las eliminatorias por el título. Lejos quedan ya la Final de Conferencia disputada en el año 2000 y la Final de la NBA perdida contra San Antonio en 1999, la temporada del Lockout. Si estos números serían duros en cualquier franquicia, lo son aún más en una que cuenta con uno de los mayores presupuestos de la NBA y que está afincada en la ciudad más importante del mundo.
Es por todo ello que el equipo ha decidido cambiar de rumbo, aunque pareciera carecer de alguno claro, fichando a jugadores que han sido All Star, aunque no estén en el mejor momento de sus carreras, como Derrick Rose, otrora MVP, y Joakim Noah, además de otros de contrastada calidad y experiencia como son Brandon Jennings y Courtney Lee y jóvenes que apuntan alto como Marshall Plumlee, Mindaugas Kuzminskas o Willy Hernángomez. A todos ellos se les suman jugadores que pueden aportar bastante dentro de roles determinados como son Justin Holiday o Maurice Ndour. De la temporada pasada continúan Carmelo Anthony, Kristaps Porzingis, Lance Thomas, Kyle O’Quinn, Louis Admunson y Sasha Vujacic. A fecha de publicación de este artículo están buscando su continuidad en la franquicia los exteriores Chasson Randle, Ron Baker, J. P. Tokoto y Damien Inglis, todos ellos con contrato no garantizado.
Analizando por posiciones el equipo parece más equilibrado que los últimos años, con unos cuantos jugadores que aseguran cierto rendimiento. Aunque por otro lado no deja de ser una incógnita aún el rendimiento real que puedan llegar a ofrecer Rose, Noah o Jennings tras los peores años de sus vidas deportivas debido a las lesiones. Los dos bases habrán de intentar reconvertirse en creadores de juego de esos que hacen todo lo posible para encontrar a sus compañeros en las mejores posiciones y crearles las ventajas, renunciando a muchos tiros propios. Nadie duda de su capacidad para generar estas ventajas, incluso viendo reducidas sus capacidades atléticas, sobre todo la explosividad. Pero en cambio en ambos casos si se cuestiona su voluntad de trabajar en este sentido.
Por otro lado la aportación de jóvenes que en otras circunstancias no deberían tener un papel tan protagonista también se antoja fundamental. Es el caso de los rookies Hernángomez y Plumlee, en los que se tienen grandes esperanzas y tal vez en menor medida de Kuzminskas. Menos dudas hay puestas en Porzingis y O’Quinn pues ya han demostrado una importante ética de trabajo y progresión.
A pesar de que a finales del mes de agosto ESPN, en su tradicional predicción para la temporada regular, les situara repitiendo balance con 32-50, para terminar como decimoterceros en la Conferencia Este, no sería de extrañar que, si se dieran todos o muchos de estos condicionantes y les respetasen las lesiones, los Knicks luchen por alcanzar los Playoffs por el título y quién sabe si poner en aprietos a algún favorito en primera ronda.