Carácter Baskonia: volver a empezar
La palabra “reconstrucción” está siendo habitual en Vitoria en los últimos veranos, ya que el Baskonia necesita reinventarse año tras año y no precisamente porque el club así lo quiera. Este verano el club se ha enfrentado a la mayor limpieza de plantilla que ha tenido que hacer en los últimos años, ya que, entrenador incluido, se ha tenido que desprender de 10 hombres. La exitosa campaña vivida la pasada temporada no ha pasado desapercibida y grandes clubes tanto de Europa como de otros continentes han puesto sus ojos en varios jugadores del Baskonia.
El primero en marcharse fue precisamente el entrenador. Perasovic abandonó el club, tentado por el dinero turco, en este caso del Anadolu Efes de Estambul. El Baskonia poco pudo hacer para retenerlo, ya que la oferta era irrechazable por parte de Velimir. Esa decisión enfureció a muchos aficionados del club porque creían que Perasovic representaba los valores y el conocido “Carácter Baskonia”.
Se apostó por Sito Alonso para sustituirle, un hombre con experiencia en los banquillos de la Liga Endesa, ya que ha dirigido a clubes como el Gipuzkoa Basket o el Bilbao Basket, este último durante las últimas dos temporadas.
El club tenía esperanzas de renovar a varios jugadores a los que se les acababa el contrato y que habían sido importantes la pasada campaña como Mike James o Ioannis Bourousis, pero fue prácticamente imposible. James no dudó en aceptar la oferta griega del Panathinaikos y poco después se le unió Bourousis ya que finalmente se descartó la posibilidad de que pudiese jugar en la NBA.
El que intentó mantener vivo el sueño de la NBA hasta el final fue Darius Adams, otro jugador que acabó abandonando la disciplina baskonista tras finalizar contrato, para finalmente irse a China con posibilidad de volver tanto a Europa como a América en Febrero.
Otros, pese a tener contrato, se desvincularon por mutuo acuerdo con el club, como es el caso de Roll, Planinic o Corbacho. Michael Roll puso rumbo a Turquía para jugar en el Besiktas después de haber jugado los Playoffs de la Liga Endesa con el Baskonia. Planinic y Corbacho también abandonaron la disciplina baskonista pero en este caso para continuar en la Liga Endesa. Planinic puso rumbo al Herbalife Gran Canaria y Corbacho volvió a la que fue su casa, el Obradoiro.
Davis Bertans también rompió contrato con el Laboral Kutxa Baskonia para cumplir su sueño de jugar en la NBA y firmó con los San Antonio Spurs. El mayor de los hermanos Diop, Mamadou, también abandonó el Baskonia en busca de minutos y recaló en la liga belga.
El último en abandonar la disciplina baskonista fue el capitán Fabien Causeur, que de este modo puso fin a una andadura de 4 años, donde ha sido uno de los grandes pilares del Baskonia. Firmó con el Brose Baskets Bamberg alemán.
De la temporada pasada tan solo continúan Blazic, Tillie, Diop, Hanga y Shengelia. Y estos dos últimos han sido pretendidos por grandes equipos como el Barcelona o el Panathinaikos, aunque parece que finalmente continuarán.
Pero el Baskonia no es un club cualquiera y no se asustó ante esta situación, ya que empezó a fichar con mucha cabeza. El primero en llegar fue Johannes Voigtmann, un interior que no era lo suficientemente capaz de hacer olvidar al griego Bourousis. También llegó al banquillo baskonista, tal y como recalcamos al principio, Sito Alonso. Poco después se anunció el fichaje de Rafa Luz para la posición de base. Hasta el momento fichajes correctos, sin llegar a ser auténticos cracks.
Pero poco después, una de las bombas llegó: Rodrigue Beaubois. Un base-escolta anotador, con buen físico y experiencia NBA ya significaba un salto de calidad para una plantilla necesitada. La segunda bomba no tardó mucho en caer. El italiano Andrea Bargnani fue el interior elegido para reforzar al equipo, procedente de los Brooklyn Nets de la NBA. Y el base estadounidense Shane Larkin ha sido de momento el último refuerzo, procedente también de los Brooklyn Nets. A estos fichajes se han ido sumando jugadores de la cantera como es el caso de Sedekerskis o Bordignon.
A día de hoy Sito Alonso cuenta en sus filas con 12 jugadores aunque puede que se anuncie algún que otro fichaje más. Lo cierto es que el Baskonia ha sabido reforzarse (una vez más) y que arrancarán la temporada con ilusiones renovadas para poder igualar lo logrado la pasada temporada. No será fácil, pero el plantel es bastante ilusionante, aunque sin serlo tanto como lo era la anterior temporada. Sito Alonso deberá asignar adecuadamente los diferentes roles dentro del equipo para así lograr una plantilla y un equipo que aspire a (como dice el propio club en la campaña de abonados) “tocarle las pelotas” a toda Europa.
Aunque la de este verano haya sido la mayor desbandada, en el club baskonista ya están curados de espanto y ya saben lo que es un proceso de reconstrucción. Es algo casi mecánico que ha ido sucediendo verano sí y verano también en Vitoria. Sin ir más lejos, hace un año ya abandonaron la disciplina 4 jugadores más el técnico Ibon Navarro. Jugadores como Orlando Johnson, D.J. White, Doron Perkins o Lamont Hamilton se fueron del Baskonia aquel verano. Las bajas se suplieron con mayor o menor acierto, con el caso de Bourousis en la parte positiva como el de Corbacho en la parte negativa.
Otro mercado movido fue la de a temporada 2011-2012, marcado por el cierre patronal de la NBA. La directiva baskonista no desaprovechó la oportunidad y fichó a algunos cracks como Goran Dragic, Kevin Seraphin, Reggie Williams o Joey Dorsey, aunque ninguno de ellos acabase el curso en Vitoria ya que volvieron a la NBA, una vez que arrancó la liga.
Lo que está claro es que cada vez que el conjunto baskonista cuaja una gran temporada, lo termina “pagando” en los despachos, porque los mejores se van a equipos que pueden pagar mayores salarios. De todas formas, el pasado ya es historia y a partir de esta temporada toca empezar a escribir el presente y el futuro de este club.