MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES
TORONTO RAPTORS 116-89 MIAMI HEAT

Al final la lógica se impuso a la voluntad. Era más que evidente que la falta de centímetros y la escasa rotación de los Heat iban a terminar por pasar factura al equipo. Y no es que los Raptors hayan demostrado nada especialmente interesante. Tan sólo han aprovechado su superioridad bajo los tableros para liquidar la eliminatoria en el séptimo y definitivo partido para pasar, por vez primera en su historia, a la final de la Conferencia Oeste. Me temo que eso es lo único que podrán contar de esa final: que estuvieron frente a los Cavaliers del Rey LeBron.
Por fin Lowry hizo un gran partido, con buenos porcentajes de tiro y repartiendo juego a sus compañeros (35 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias), acompañado de DeRozan (28 puntos) que estuvo más desacertado en el lanzamiento a canasta, a quienes ningún jugador de los Heat puso en especial apuro en defensa. Muchos centímetros de distancia entre unos y otros a la hora intentar evitar los tiros de media y larga distancia. Demasiado cansancio.
El hombre con nombre de hamburguesa, Bismarck Biyombo, se mostraba eufórico al final del partido con sus 17 puntos y 16 rebotes (él sólo cogió casi tantos rebotes ofensivos como todo el equipo de Miami), supongo que estaría satisfecho de ver que no es el peor lanzador de tiros libres del mundo (5 de 12) y que no sabe que se va a enfrentar al mejor reboteador ofensivo de la NBA. Veremos si domina los tableros frente a pívots de verdad.
Por los Heat Spoelstra sabía que sus opciones pasaban por ser un equipo, y actuaron como tal. Sus 6 jugadores principales anotaron más de 10 puntos. Fallaron Richardson y Johnson, y eso se notó mucho en un equipo con tantas carencias anotadoras desde el exterior cuando Joe Johnson, fichaje de relumbrón en el mercado invernal para solucionar este problema, se convierte en el máximo exponente de dicho problema al anotar un 13 por ciento de sus lanzamientos de 3 puntos (3 de 22). Y aún así el equipo de Florida aguantó en el partido hasta último cuarto, que comenzaron con una desventaja de 8 puntos (86-78) al conseguir recortar la que había sido máxima diferencia hasta el momento por parte de los Raptors de 17 puntos.
Pero fue en ese último cuarto cuando Toronto marcó la diferencia física e hizo del mismo un festival anotador ante la impotencia de Miami (30-11 en el marcador y 15-7 en los rebotes). La baja de Whiteside fue demasiado para ellos en esta serie.
El martes comienza la final de la Conferencia Este. Veremos si llega a durar 15 días. Yo apuesto a que no.