EL BALÓN ES MÍO
MIAMI HEAT 103-91 TORONTO RAPTORS
(Serie 3-3)
Pues habrá séptimo partido. Aunque el partido de la serie más igualada de estos PlayOffs fue el que marcó mayor diferencia en el marcador entre ambos equipos y en el que ambos equipos dieron mayor muestra de cansancio defensivo, sobre todo en el segundo y tercer cuarto.
El partido comenzó como se esperaba, buenas defensas que forzaban los tiros del equipo rival y malos pases con Miami jugando con Luol Deng como hombre alto, y sin pívot iba a jugar todo el partido mientras que Lowry y DeRozan anotaban 13 de los 20 puntos de los Raptors en una declaración de intenciones de lo que iba a ser el partido para el equipo canadiense (entre ambos anotaron el 65 por ciento de los puntos de Toronto).
En los dos siguiente cuartos fue cuando se produjo el festival anotador de esta serie por parte de ambos equipos, con 52 puntos para Toronto por 61 para Miami gracias a que Dragic (30 puntos) metió 23 de sus puntos en estos 24 minutos para que los de Florida cogiesen una ventaja cómoda (82-72) que mantuvieron hasta el final del encuentro.
El en último cuarto volvieron a aparecer las defensas y el monopolio del balón por parte de Lowry para los Raptors, incapaz de hacer partícipe a sus compañeros del juego y de la anotación, lanzando la mitad de los tiros de campo y todos los tiros libres de su equipo. Por momento da la sensación de ser uno de esos chavales que, cuando éramos pequeños y jugábamos al fútbol en la calle, llevaba el mejor balón metido en una bolsa de plástico del Simago y gracias a eso jugaba, pero corríamos el peligro de que en cualquier momento algo le sentase mal y volviese a meter el balón el la bolsa para marcharse a su casa y dejarnos allí tirados. El jugador por encima del equipo en grado superlativo. Un jugador egoísta donde los haya, que es capaz de hacer un último lanzamiento para aumentar su estadística a falta de pocos segundos para la finalización del partido cuando el mismo está totalmente decidido (algo que no se ve en la NBA, ya que se considera de mal gusto y una falta de respeto), o de no lanzar al finalizar un cuarto si eso va a suponer un fallo en su estadística por ser un tiro muy alejado. Mientras en Miami tomó las riendas Wade (22 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias) para mantener a raya a Toronto.
El próximo domingo conoceremos el rival de los Cavaliers…por fin.